El reportaje de un estudiante erasmus en Budapest

viernes, 2 de septiembre de 2011

Primeras 48 horas en Budapest

Por fin la entrada deseada, la primera entrada en suelo magyar. Han pasado menos de 48 horas desde que aterricé, de las cuales unas 10 las he pasado durmiendo, pero no os imagináis la de kilómetros que he andado y la manera en la que se pueden aprovechar dos mañanas y una tarde, que es lo que llevo aquí realmente.

Llegué a Budapest a eso de las 00:30 AM, junto a otro español que conocí en el avión y que también va a pasar el año aquí, cogimos un taxi juntos hacia el centro, hacia nuestros respectivos hostales, que nos salió por 5500 HUF (20 euros, 10 cada uno). El tema de los taxis en Budapest es un poco curioso, ya que aquí el precio parece que está "estipulado", antes de montarte en el taxi le dices a dónde quieres ir y el taxista te dice lo que te va a cobrar, si no te gusta eres libre de seguir buscando otros taxis. En nuestro caso no le dimos muchas vueltas, ya que habia pocos taxis y ya se estaba formando cola para cogerlos, así que no lo pensamos demasiado.
Como curioso fue esto, también lo fue la llegada al hostal (La casa de la música, muy recomendable). Nada más entrar veo que hay una reunión de gente tomando unas cervezas en una especie de patio con una barra, y al preguntar por recepción una voz un poco borracha me manda hacia la segunda planta, que es donde está el hostal. El edificio es una especie de "Casa de la juventud", un alburgue juvenil donde, aparte de haber un hostal, también hay otras actividades para la gente joven, además de estar decorado con diversos grafitis y una amplia gama de colores. Mi habitación era una compartida con once personas más, así que nada más entrar a la habitación dejé la maleta por ahí y me fui a mi cama, sin hacer mucho ruido, algo un poco absurdo ya que se escuchaba aun a la gente hablando abajo xD. Unas fotillos del hostal:




Después de las primeras horas de sueño en Budapest, me despierto escuchando a unos americanos hablando entre ellos, al no entender casi nada empiezo a preocuparme de mi capacidad para comunicarme los primeros días por aquí. Sin preocuparme mucho aun ese tema, desayuno y me dispongo a pegarme la primera caminata por la ciudad.
Budapest es una gran ciudad donde las haya, nada más entrar en la primera avenida más o menos grande ya veo como comparten terreno el tranvía, el autobús y el metro, y es que Budapest es una de las ciudades con mejor transporte del mundo. Ah, y barato. Ya mencioné en las primeras entradas que por unos 15 euros al mes los estudiantes tenemos derecho a todo el transporte público de la ciudad. Ahora que todavía no tengo carnet de estudiante pago unos 200 - 300 HUF por viaje (1 euro).
Aquí algunas de mis primeras fotos en mis primeros minutos por la calles de Budapest. Están hechas con el móvil, ya que siendo muy listo por mi parte me llevé la cámara con la batería al límite, algo muy típico en mí:



Estatua de la libertad de Budapest, al fondo:


Esto me ha llamado bastante la atención: los retretes subterráneos.

El National Museum:


Después de casi una hora andando e investigando decido que es hora de ir a comer, y como soy muy original, me voy a un lugar llamado "Bocadillo café", con algunas birrazadas como éstas en la pared:



Por la tarde tenía pensado ir a comprarme la tarjeta para un móvil vodafone que me han dejado de España. Desgraciadamente, parece que la tarjeta de vodafone de Hungría no vale para un vodafone en España, por lo que me vi obligado a comprarme un móvil nuevo. Eso sí, el móvil más perro que había en la tienda, que no tendrá internet ni cámara, pero tiene una linternita que quita el sentío. Me salió el móvil y 2000 HUF de saldo (7.5 euros) por 8000 HUF (30 euros). Como podéis observar con este detalle, los aparatos de telefonía, ordenadores y tal no es que sean muy baratos tampoco, los precios en ese aspecto son muy similares a España (no como en el aspecto nocturno, del que hablaremos más abajo).
Una vez con el móvil, llamé al español que vino en mi avión para ver si esa noche íbamos a ir a tomar algo como hablamos en un primer momento. Al no fructiferar el plan, ya que él había quedado a una hora en la que ya no me daba tiempo ni a llegar al hostal, tenía pensado comerme cualquier guarrada por ahí, tirar para el hostal y aprovechar para escribir algo. Pero...cómo es la vida, cuando ya estaba sentado en un escalón de la puerta del hostal, fumándome un cigarro y pensando en las ganas que tenía de descubrir la vida nocturna de Budapest y que no iba a saciar porque aun no tenía suficientes efectivos de los que tirar en mi agenda, se hizo la luz. Sale un tíio del hostal, de unos 35 años y me pregunta (en inglés) que dónde podía ir a comerse algo rápido. Yo instantes antes me había comido un kekab con refresco por 900 HUF (algo menos de 3 euros) así que intenté explicarle dónde estaba. A la tercera palabra que dije en inglés me suelta: "¿pero tú eres español no?" (¬¬, por lo que veo se nota tela mi acento), por lo que nos pusimos a hablar y terminé conociendo a un argentino estupendo, un crack como persona y mejor mago: "Alejandro Leonian". Tiene vídeos en el youtube haciendo magia y hasta una aparición en "Mujeres y hombres y viceversa", todo un figura. Estuvimos hablando largo y tendido, tan largo y tan tendido que acabamos en un bar tomando unas birras con otro argentino y un mexicano.
Me dijo una frase que nunca olvidaré: "Puede faltarte dinero, pero te sobraran historias que contar". Historias como ésta, detalles que hacen tan especial esto de irte al extranjero.
Continuando con la vida nocturna y con respecto a los precios, la verdad es que es un aspecto que encuentro mucho mejor que en españa. Por unos 1500 HUF (5.5 euros) pude tomarme 3 jarras de medio litro de cerveza, y con unos 700 HUF (2.5 euros) te puedes comprar un paquete de Marlboro, así que el Pall Mall ni te cuento. Para seguir con la lista de precios, y sin ninguna otra intención secundaria, esta noche también sabré a cuánto están las copas y cuánto cuesta entrar a una discoteca, por ejemplo. Por lo que me han comentado, la entrada a una discoteca no suele sobrepasar los 500 HUF (algo menos de dos euros), lo veo algo exagerado, pero de ser así sería todo un triunfo.

¡Va por ustedes! (cerveza soproni)


En estas primeras 48 horas también me ha dado tiempo de ver lo que sea posiblemente mi futuro piso, y es que este mediodía, con algo de resaca aun de las cervezas, he quedado con un chico portugués para que me enseñara un piso, en el que les hacía falta a él y a otro portugués un compañero más para completarlo. Por lo que he visto está bastante bien, todas las habitaciones tienen escritorio, armarios, sillas comodas, calefacción, etc. y al piso en general no le falta de nada, tiene hasta los típicos detalles en los que no te sueles fijar de primeras como la plancha y el horno, así que seguramente esta tarde noche ya esté llamando para confirmar que voy para allá.
Hablando de los portugueses, me he acordado de una de las cosas que me tiene un poquito preocupado, y que me preocupó también cuando escuché a los americanos hablar en mi habitación: mi dificultad para mantener una conversación más o menos fluida sin pararme demasiado. El argentino del que hablé antes me tranquilizó un poco, y me dijo que es normal que si no tengo un nivel alto en mi país no puedo pretender hablar bien desde el primer día, pero claro, veo que hasta los portugueses que no suelen tener fama de dominar el inglés lo hablan de puta madre...y pienso que tengo mucho que mejorar. También me comentó este chico que ya veré como en cosa de un mes o así ya he olvidado esta preocupación, y que sin darme cuenta voy a terminar hasta pronunciando de puta madre y sin pararme. Ojalá tengas razón amigo, porque es algo incómodo por ahora, sobre todo si estás en un bar con la música sonando.

Para terminar esta entrada inaugural de la aventura, dejo algunas fotillos que he hecho esta mañana, esta vez con la cámara:

Ésta me ha quedado bastante bien:


Edifico de arquitectura neoclásica, estilo que más predomina en el lado de la ciudad perteneciente a Pest, que es donde me encuentro. Cuando vaya por Buda pasaremos al estilo barroco, típico de las casas residenciales del antiguo Distrito del Castillo:


El húngaro, la lengua del diablo:


Jószef körút (una avenida cualquiera):


Y sin más, he resumido todo lo posible estas primeras horas en la reina del Danubio. Posiblemente la próxima entrada la escribiré una vez asentado en el piso y quien sabe si ya registrado en la Universidad, cuyo periodo de registro comienza el lunes 5 y acaba el 14.

Üdvözöljük! (¡Bienvenido!)

3 comentarios:

  1. Menuda llegada a la ciudad!!
    Espero que no tardes mucho en volver a contarnos anécdotas como las de estas 48h y si es instalado en tu pisoerasmus, mejor que mejor :)

    "Puede faltarte dinero, pero te sobrarán historias que contar"
    Esta frase me la guardo ;)

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  2. Ese hungaroo!!

    Me alegro de que hayas llegado bien y ya estes empezando a descubrir mundo y gente. Esa frase del argentino creo que ya la habre oido una docena de veces, en 5 o 6 lenguas diferentes..jaja...parece que es algo comun entre viajeros :)

    Sigue disfrutando y contandonos. Yo el lunes tiro ya para Pekin.

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  3. jajaj Veo que te va bien!! Por lo menos algo entretenido te veo... ya verás como te haces con la ciudad pronto... Seguiré leyendo lo que escribes, lo cuál no se te da nada mal. Un abrazo!!!

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